Teletrabajo: ventajas e inconvenientes… y algunos consejos
Teletrabajo: ventajas e inconvenientes… y algunos consejos
El Coronavirus nos ha hecho cambiar todos nuestros hábitos: personales, de higiene, de trabajo… Tras la Cuarentena, muchas empresas han optado por continuar con el teletrabajo previamente exigido, como medida de seguridad y prevención ante nuevas olas de contagio.
El teletrabajo tiene muchas ventajas pero también unos cuantos inconvenientes. Algunos beneficios de trabajar desde casa son que no tienes que desplazarte, coger autobuses, metros o coches, reduces las posibilidades de llegar tarde, puedes vestir “como quieras” (si no tienes videollamadas a la vista), puedes comer en casa todos los días (sin gastar dinero en restaurantes o tener que comer comida poco saludable) y, además, generalmente puedes conciliar mejor vida familiar y laboral.
Pero todo tiene su parte mala si no se gestiona bien… Por eso, se puede pecar de no cumplir los horarios establecidos por la empresa, escaquearse un poco del trabajo en ciertos momentos, perder el tiempo al no tener nadie alrededor, levantarte a picotear a la cocina, aprovechar para hacer tareas de la casa, distraerte con asuntos familiares…
De ahí que sea tan importante tener claros los hábitos de trabajo diarios y cumplirlos en la medida de lo posible. Así, podrás tener buenas dinámicas y aprovecharás bien tu jornada de trabajo desde casa.
Por ello, desde SETI queremos ayudaros a que mejoreis vuestro día a día teletrabajando y que vuestras rutinas sean productivas y tengáis los mejores resultados.
Consejos para teletrabajar desde casa
Como ya has visto, el teletrabajo tiene ventajas y desventajas, pero la clave reside en saber organizarse bien y tener ciertos conceptos muy claros. Sigue nuestros consejos y te aseguramos que tu jornada laboral será cómoda y fluida, además de eficiente.
1. Fija tu horario
Si trabajas para una empresa, sigue los horarios preestablecidos. De esta manera, podrás coincidir en tiempo con tus compañeros y seguirás una rutina clara.
Con excepción de ciertas urgencias inevitables, trabajar desde casa puede suponer que entremos en un círculo vicioso en el que no dejemos de trabajar. ¡NO CAIGAS EN ESTO! Cumple con tu jornada y cuando llegue tu hora de acabar, apaga el ordenador. Si lo dejas encendido, caerás en la tentación de volver para revisar algo, ver si te han respondido, editar algo que has recordado… ¡Pero no lo hagas! Espera a la mañana siguiente y planifícalo en tu jornada.
2. Organiza tu espacio de trabajo
Es imprescindible que montes un espacio de trabajo personal, donde tengas todo tu material, ordenador y demás elementos de tu día a día.
También es muy importante que si convives con alguien o tienes familia, sean conscientes de que ese es tu espacio (si no es compartido) y que tienen que respetarlo y cuidarlo, al igual que tratar de no molestar o interferir en tu trabajo cuando estés cumpliendo tu horario semanal. Si lo entienden, prevendrás futuras interrupciones (que no sean realmente necesarias) y tu dinámica será mucho más fluida.
3. Ten las herramientas necesarias
Como es obvio, si te toca trabajar desde casa, debes tener todas las herramientas, ya sean físicas o de software, necesarias para que lleves a cabo tus tareas. Silla, ratón, teclado, auriculares, reposapiés, programas de intercomunicación empresarial, aplicaciones de software a medida de tu empresa, buena conexión a internet…
Si te falta algún elemento necesario, házselo saber a tu empresa para que lo gestionen y te lo consigan.
4. No trabajes en pijama
Esto es algo en lo que todos caemos alguna vez. La tentación es muy fuerte, pero acaba siendo negativa… Levantarse, ducharse y vestirse son una parte de nuestra rutina diaria imprescindibles. Incluso ayudan a nuestro cerebro a activarse y saber que empieza una nueva jornada.
Eso sí, puedes optar por ropa más cómoda o casual de la que escogerías para ir a la oficina. ¡Alguna ventaja sí tiene el teletrabajo!
5. Haz descansos
Descansa lo mismo que harías en la oficina. Tómate un café o un snack saludable , pasea 5 minutos… Incluso sal de casa si lo necesitas y toma un poco el aire, o si tienes un bar cerca, tómate ahí el café. El objetivo es desconectar y recargar pilas para volver al trabajo.
Peeero no caigas en levantarte continuamente, ir a la cocina, picotear, jugar con el perro, encender la tele… Cualquiera de esas cosas solo afectará negativamente a tu concentración y productividad.
6. Habla con tus compañeros
Si tienes un equipo de trabajo habitual, ponte en contacto con ellos por Skype, Slack o la plataforma empresarial que utilicéis, comentad el día a día, charlad un poco…
Teletrabajar no significa perder las conexiones o amistades con nuestros compañeros. Mantenerse sociable es imprescindible para una buena dinámica de trabajo desde casa.
7. Sé responsable
Por último y como es lógico, sé responsable con tu trabajo. Aunque siempre hay días mejores y peores, donde somos más productivos o menos, al menos esfuérzate siempre por tener buenas dinámicas y sacar el trabajo adelante.